Pero en realidad el pánico tiene una base falsa ya que la vida se dice no finaliza con la muerte, se dice que le ser humano pasa a otra vida, probablemente más tranquila y despojada de las inquietudes y miserias.
Lo que cierra es la puerta de las inmediateces materiales, la fecha de todo deseo ilusorio por ello hay que dar gracias siempre. Por cada día vivido, por cada hora, por cada minuto, por cada día vivido es una ventaja ya que no se vive un día menos, al contrario se vive un día mas cada vez.
Lo único que deja el ser humano en su paso por la vida es el amor. Solo queda de su trayectoria vital el afecto que se supo cultivar, y todo lo demás se lo llevara el viento. Llegamos a este mundo desnudos y sin equipaje, sin boletos d avión, sin nombre, sin cuentas bancarias, etc. Solo se tiene seguro en ese instante, el amor de la madre que sudorosa y agotada estará siempre ahí.
Cuando al final de la vida nos tenemos que ir, lo hacemos por la misma puerta estrecha del principio, sin nada en las manos, solo el afecto sembrado en el alma de los seres que conocimos. Ese y no es el milagro del amor y el secreto de la vida.
El amor es así: gratuito, fiel, generoso y dormido.
Hermoso Jorge, profundo, real... vinimos a este mundo sin nada y sin nada nos vamos...
ResponderEliminarUn saludo calido