Pero ser joven es nuestra niñez, era lo como un sueño inalcanzable, ya que el ver a nuestros hermanos mayores desenvolverse con cierta libertad nos causaba una sensación “egoísta”. Pero al crecer y llegar a ser jóvenes, nos damos cuenta que no todo es salir de bonche y disfrutar de los placeres que tiene la vida.
Ser joven es una responsabilidad que tiene cada cual, para encaminarse a dónde realmente quiere llegar, tener metas, objetivos, tener una visión clara y precisa de lo que quiere hacer para un mañana, un mañana que es desconocido, el cual con sus visiones futuras nos da una idea de como seremos y a donde llegaremos.
Ser joven en algunos casos es un reto, una lucha de obstáculos que día a día hay que salir a tratar de vencer, donde los valores y buena preparación muchas veces ni se toman en cuenta para darnos la oportunidad de crecer como ser humano, como estudiantes y mucho menos como profesionales. En un país donde la justicia es ciega, el gobierno quiebra la democracia y nos volvemos un país un país inmerso en la corrupción y el narcotráfico.
Pero aun así, toma las riendas de tu vida, de tu presente, acepta las circunstancias sin envidiar ni protestar, busca nuevos desafíos y preparate para enfrentarte ante cualquier tropiezo de los cuales se aprende a luchar por lo anhelado y convertir cualquier fracaso en victoria.
En resumen: ser joven significa la inquietud de mil ideas y la acción de mil batallas de las que nosotros debemos combatir para lograr nuestros sueños.
“Porque lo más importante para los jóvenes y para la humanidad es la lucha por nuestro ser”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario